César Luis Menotti falleció a los 85 años. El “Flaco”, como era conocido, es recordado como el gran director técnico que permitió las condiciones para que la Selección Argentina tenga un plan a largo plazo de trabajo.
Fue quién impulsó la tradición del fútbol argentino. Convirtió a la Selección del ’78 en un equipo eléctrico, frontal, vertiginoso, dispuso un reglamento y soportó críticas; con tan sólo 35 años. A eso se sumó su carisma, con una retórica hipnótica y personalidad fuerte. Logró conformar un equipo de todos los tiempos, inolvidable. David Bracuto, el presidente de la AFA, debía elegir un nuevo DT entre varias opciones, luego del flojo desempeño del seleccionado en el mundial ’74. Los principales rivales eran dos figuras: por un lado, Alfredo Di Stéfano, por el otro Carlos Griguol. Menotti, con el aval de Lorenzo Miguel, sindicalista de peso, ganó la pulseada.
En los últimos tiempos se dedicó a ser un hombre de decisión y consulta permanente en la gestión de las selecciones nacionales. Fue clave para sostener con paciencia el proceso comandado por Lionel Scaloni en la Mayor, quien, sin experiencia previa, pasó de interino a campeón de América y el mundo.