Después del revés en el Senado, en el oficialismo hacen números para ver cómo podrán sostener el veto al aumento de las jubilaciones, y miran esperanzados a la Cámara de Diputados donde el Presidente tendrá complicado sostener la mayoría que le permitía sostener sus proyectos.
Para que caiga el veto de Milei, la oposición debe juntar dos tercios en ambas cámaras del Congreso. En Diputados, con presencia completa, necesitaría 172 votos de rechazo al veto.
En el gobierno descuentan el apoyo de 38 diputados de La Libertad Avanza. La duda es Marcela Pagano. Se descuenta el apoyo de la tucumana Paula Omodeo y el fueguino Ricardo Garramuño.
Para sostener el veto anterior el PRO aportó 34 diputados. Ahora no está claro que se mantenga ese número. En aquel momento estuvieron presentes los “radicales con peluca”, que ahora formaron el bloque Liga del Interior.
Los que ya manifestaron su posición son los tres diputados tucumanos que responden a Osvaldo Jaldo. Desde el bloque Independencia confirmaron que la orden es rechazar el veto.