El gobernador Osvaldo Jaldo participó este sábado del cierre de la 45ª edición de la Fiesta Nacional de la Feria, uno de los eventos culturales más emblemáticos del interior tucumano, que se desarrolló durante todo el mes de julio en la ciudad de Simoca.
Además, el Gobernador entregó equipamientos para los puesteros de la feria.
Durante su intervención, el gobernador destacó la importancia de preservar las tradiciones populares como parte del patrimonio cultural tucumano: “Vinimos a acompañar a este gran intendente que tiene Simoca, a su legislador Marcelo Herrera, y a cada uno de los concejales que trabajaron con la municipalidad para que esta fiesta se desarrolle con tanto éxito. Hemos visto no solo a tucumanos, sino también turistas de provincias vecinas e incluso visitantes del exterior. Simoca trasciende los límites de la Argentina. Esto tiene que ver con nuestra historia, nuestra cultura, nuestras raíces. Menos pantallas y más identidad: eso es lo que debemos transmitir a los jóvenes”, expresó Jaldo.
El mandatario provincial rememoró sus propias vivencias a caballo durante su infancia en Trancas, y subrayó la importancia de mantener la cercanía entre los gobernantes y el pueblo: “Por más que uno sea gobernador, nunca deja de ser ciudadano. Esto no se trata de un gesto institucional, se trata de ser parte, de vivir las tradiciones como cualquier vecino. Eso es lo que nos une como tucumanos y como argentinos”.