Nutricionistas, profesionales médicos, personal de la Asistencia Pública Municipal y público en general actualizaron sus conocimientos sobre manipulación segura de alimentos durante una capacitación que dictó la Dirección de Bromatología de la Municipalidad de San Miguel de Tucumán, en el centro de atención a la salud ubicado en Chacabuco 239.
El taller formó parte de las actividades organizadas por la Asistencia Pública en articulación con otras reparticiones de la comuna capitalina en el marco de la “Semana de la Nutrición”, con motivo de conmemorarse 11 de agosto el Día del Nutricionista.
Participaron de la jornada de este jueves la directora de la Asistencia Pública, Karina Faccioli, y la directora de Bromatología, María Emilia Cruz.
Cuidar la higiene, separar los alimentos crudos de los cocinados, usar agua y materias primas seguras y mantener los alimentos a temperaturas seguras, son algunas de las medidas esenciales para prevenir enfermedades transmitidas por alimentos, indicó la directora de Bromatología, área que depende de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable municipal.
Cruz sostuvo que “el foco puntual es la prevención de las enfermedades transmitidas por los alimentos, que es un tema que se une con la promoción de los hábitos saludables de nutrición” ya que “esto mejora o refuerza la cadena que une producción, manipulación y consumo responsable de los alimentos”.
Afianzar los conocimientos en inocuidad alimentaria “es importante para que tanto los que manipulan los alimentos puedan garantizar un alimento seguro y de calidad al consumidor; y también, de parte del consumidor, saber en la hora de elegir sus alimentos cuáles son los que están aptos o no”, explicó la funcionaria.
Cinco claves de la inocuidad de los alimentos
La directora de Bromatología precisó cuáles son las “cinco claves de la inocuidad” que todos deben tener en cuenta al manipular alimentos, para reducir significativamente el riesgo de enfermedades:
1 – Mantener la limpieza: esto implica lavarse las manos frecuentemente, especialmente antes de manipular alimentos y después de ir al baño. También es importante limpiar todas las superficies, utensilios y equipos usados en la prepara ración y proteger los alimentos de insectos y otros animales.
2 – Separar alimentos crudos de los cocinados: La contaminación cruzada ocurre cuando microorganismos de alimentos crudos, como carne, pollo o pescado, se transfieren a alimentos listos para comer. Para evitar esto, es crucial utilizar equipos y utensilios diferentes para manipular alimentos crudos y cocinados, y mantenerlos en recipientes separados.
3 – Cocinar completamente: La cocción adecuada de los alimentos, especialmente carnes, aves, huevos y pescado, mata los microorganismos peligrosos. También se aconseja recalentar completamente la comida cocinada y hervir alimentos como sopas y guisos para asegurarse que alcancen una temperatura de 70º.
4 – Mantener los alimentos a temperaturas seguras: No dejar los alimentos cocinados a temperatura ambiente por más de dos horas, y no descongelar los alimentos a temperatura ambiente, ya que algunos microorganismos pueden multiplicarse rápidamente en estas condiciones. Es importante mantener los alimentos perecederos refrigerados por debajo de 5°C y los alimentos calientes por encima de 60°C.
5 – Usar agua y materias primas seguras: Utilizar agua potable, seleccionar alimentos sanos y frescos, elegir productos ya procesados tales como leche pasturizada, lavar las frutas y hortalizas, especialmente si se comen crudas y evitar el uso de alimentos después de su fecha de vencimiento.
