La informalidad laboral volvió a dispararse en la Argentina y alcanzó 43,2% de los ocupados, el valor más alto desde 2008. El estudio revela que cuatro de cada diez trabajadores carecen de cobertura previsional, impositiva o laboral. Interanual, la informalidad subió 1,6 %.
Entre los asalariados, la tasa llega al 37,7%, mientras que entre los trabajadores por cuenta propia asciende al 62,5% y entre los empleadores al 22,2%. En total, los asalariados representan el 63% del empleo informal, seguidos por los cuentapropistas (34%).
La informalidad golpea con fuerza a los jóvenes de 16 a 24 años, donde la tasa alcanza el 63%. En cuanto a los mayores de 65 años (60 en el caso de las mujeres) registran una informalidad del 51%, mientras que el grupo de 45 a 64 años muestra la menor incidencia, con 34,5%.
El informe concluye que la elevada informalidad en Argentina no responde a los ciclos económicos, sino a un problema estructural de baja productividad, alta rotación y deficiente fiscalización laboral.
