• Reducir: consiste en simplificar el consumo y la utilización de productos. Por ejemplo, comprando a granel y evitando los productos de un solo uso.
  • Reutilizar: se trata de dar una nueva vida a las cosas que ya no sirven para la función inicial que tenían cuando las adquirimos. Por ejemplo, reutilizar las cajas de cartón, convertir camisetas en bolsas…
  • Reciclar: esta acción implica la transformación de los residuos en otros productos. Con ello se logra una disminución de la producción de nuevos materiales.